sábado, 31 de diciembre de 2011

2011, Una Imagen para Fin de Año

                    
Cuadrado negro. 1923-29. Kasimir Malevich.


Museo Estatal de Rusia, San Petersburgo 

 Suprematismo

Óleo sobre lienzo: 106,2 x 106,5 cm.

lunes, 12 de diciembre de 2011

La Sierra de Córdoba, Álbum de Otoño

Aún quedan hojas prendidas a las ramas, el hielo no ha llegado a las sendas umbrías,  el esponjoso musgo luce verde en rocas y vaguadas, pero es preciso darse prisa si queremos encontrar el esplendor otoñal; rojizos, ocres, dorados luminosos y cálidos que dentro de poco darán paso a los cenicientos y fríos colores invernales. Debemos darnos prisa, es preciso correr si queremos ver a los duendes de la sierra aprovisionándose, llenando sus canastas de setas y castañas.

Qué hermosa está la Sierra de Córdoba, ese paraje que pasa por ser uno de los mejor conservados y ricos de Sierra Morena.

Santa María de Trassierra con los arroyos del Bejarano y del Molino y con el río Guadiato, cascadas cayendo en pozas recoletas y escondidas y agua mansa convertida en maravilloso espejo; con bosques de galería que te transportan directamente al norte de la península; con ruinas de molinos árabes, fuentes, acueductos y calzadas romanas; y con los Senderos de la Memoria, los que transitaron los guerrilleros, los olvidados, hace tan sólo unas décadas. El entorno de Trassierra, tan cercano, a pocos kilómetros de la capital, y como ella repleto de historia.

Y un poco más allá, aguas abajo del Guadiato, alimentándose de él, el pantano de la Breña, ampliado, de los mayores de Andalucía; un mar solitario rodeado de cerros y envuelto en las brumas de diciembre. Y bajando a la llanura, casi en Hornachuelos ya, antes de volver a trepar por el monte, hay un romántico puente (de nuevo el Guadiato), en desuso, un puente y un camino que nos lleva al reencuentro de los niños que fuimos al sumergir los pasos traviesos, curiosos, en la hojarasca caída. Y desde allí, a través de las ramas, se vislumbran y se escuchan a otros duendecillos, los del valle, simpáticos, alegres, risueños, cargados como los serranos de canastas a rebosar, pero en este caso no recolectan castañas ni setas sino los preciados y redondos frutos naranjas.






  


















martes, 6 de diciembre de 2011

Día de la Constitución, ¿Qué Queda?

Un día como hoy ha sido durante años para una gran mayoría una jornada alegre, día de celebración que llevaba implícito el cese de una dictadura y la entrada de una democracia, el derecho al voto, fundamentalmente. ¿Qué queda hoy de todo aquello?  Cuando en los noticieros de tv veamos  las celebraciones del día de la Constitución, muchos ciudadanos observarán la pantalla con apatía, otros creerán ver una obra de teatro mediocre, una pantomima hipócrita, y al menos unos cuantos millones (parados, trabajadores con empleos en precario que rozan en muchos casos la esclavitud, desauciados con la soga al cuello, jóvenes sin ilusión por el futuro, mayores sin presente...) se sentirán ESTAFADOS. 

Y quizás también muchos, como ayer y como mañana, pero sintiéndolo hoy más patente ante las imágenes que circularán por los medios, se verán embargados por la preocupación; una pesada y honda preocupación por el mundo que tenemos y por el que vendrá.

 Forges hoy en El País:

jueves, 1 de diciembre de 2011

Un Mundo Maravilloso, Louis Armstrong

Supongo que realizar una composición fotográfica como la de la entrada anterior y las composiciones que forman parte del vídeo que he montado para esta otra, no son más que terapias que me autoimpongo (píldoras de autoconvencimiento) en un intento por teñir de verde esperanza mi mirada.