Afortunados los que en Oviedo se encuentren. Por muchísimas razones, entre otras: por estar bajo el cielo asturiano, por poder echar unos culines en el Boulevard de la Sidra, y por tener la posibilidad de ver en directo al poeta de la voz profunda. Leonard Cohen ha llegado hoy para recibir el Premio Príncipe de Asturias de las Letras.
Paseante en el viaje, viajero en el paseo. Con ojos abiertos se emprende el camino y los pasos se calzan con el fino velo de la ensoñación. Tu mirada particular como compañia: amplía esta senda con tus comentarios.
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Muy bien merecido, sí señor!!!
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